martes, 6 de diciembre de 2011

Zack Snyder: en el cine, la música I-M-P-O-R-T-A



           Si algo ha quedado claro hasta ahora es que Zack Snyder, además de un grandísimo y prometedor director, tiene un gran oído para decidir qué música busca en cada película. Para la banda sonora de "Watchmen" (Zack Snyder, 2009), Snyder escogió folk y rock (incluye hasta tres canciones de Bob Dylan), y se dedicó a buscar o contratar "cover's" de canciones ya escritas (My Chemical Romance con "Desolation Row" de Dylan).

        
         Para la b.s.o. de "Sucker Punch", Snyder buscó algo más indie, más moderno, desembarazándose quizás del estereotipo "ochentero" de "Watchmen", aunque continuó prefiriendo versiones nuevas (que cumplieran los requisitos de rock alternativo e indie), para lo que requirió la ayuda de personalidades reconocidas como Björk (remix de su propia canción "Army Of Me"), Alisson Mosshart (cantante de The Kills y The Dead Weather) y Skunk Anansie (alternative brit-rock). Para ello, escogió canciones clásicas y de grupos por todos conocidas (The Stooges, The Pixies, Queen...), versionándolas, según la cantante o grupo, a un estilo más alternativo. Además, supo aprovechar la capacidad vocal de la protagonista del film, Emily Browning, así como de los actores Oscar Isaac y Carla Gugino, como muestra el hecho de que cantaron como solistas en cuatro canciones de la banda sonora. A propósito de la importancia y la relación que tiene la banda sonora con la película, Snyder comentó que "en la historia, la música es lo que las lanza a los mundos fantásticos ", es una parte trascendental que vertebra y articula los saltos realidad-ficción, por ello era tan importante vincularse al equipo técnico en la selección de las canciones.


          Hasta el día de hoy, Snyder ha dado en el clavo con la música de sus películas, ha sabido encontrar el género más acertado atendiendo a las características de la película, su ambientación y está magistralmente introducida en el film. Si bien Snyder no tuvo problemas con la crítica con su ópera prima "El amanecer de los muertos" (2004, remake de la película homónima de George A. Romero), ni con "300" (2006), ni siquiera con "Watchmen" (2009), y desoyendo las críticas hacia "Ga'Hoole" (2010), no fue así con "Sucker Punch", vapuleada por considerarla absurda, excesiva y el problema de dar rienda suelta a un director. De todos modos, me da igual, algún día hablaré de esa película que, la verdad, es que me gustó mucho.


      Se podría decir bastante sobre Snyder, para mí, uno de los directores más prometedores que hay, por no decir el que más, a causa de que ha sabido revestir con tintes de calidad lo meramente comercial. Al estilo Nolan, diría yo, películas encaminadas a ser vistas por todos y no por unos pocos, pero sin dejar de lado la calidad y el criterio. Es la maravilla que supone que la productora te dé "carta blanca", una reluciente y merecida "carta blanca" que te permite filmar, escribir e inventar todo cuanto tu creatividad te permita. La prueba es que Christopher Nolan, como productor, ha escogido a Snyder como director de "Man Of Steel" (2013), la próxima y más prometedora película sobre Superman.

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